El acero corten, también conocido como acero oxidado, es un tipo de acero muy resistente compuesto por níquel, cromo y cobre. Tras su colocación, y con el paso del tiempo, la pieza situada a la intemperie se va oxidando de forma natural desarrollando una capa protectora que la protege, haciendo que el óxido no penetre en el interior de la misma. El resultado es un acabado oxidado natural de la pieza muy de moda en las construcciones actuales.
La combinación de elementos químicos que presenta hace que este acero tenga unas características propias que lo diferencias del acero normal y que se haya convertido en un elemento muy valorado por arquitectos, escultores, paisajistas y decoradores.
Su uso está muy extendido en las construcciones, pudiendo encontrarse este tipo de acero en puertas, farolas, puentes, barandillas, fachadas y todo tipo de revestimientos.